Irán ya puso punto final a la norma que prohibe a las mujeres entrar en los estadios de fútbol para ver los partidos. Ahora es cuestión de controlar también los de la competición doméstica.
La FIFA está obligando a la Federación, y por ende al Gobierno iraní, a que retire la ley bajo la amenaza de impedir que el combinado iraní participe en competiciones internacionales.
Pero el mayor organismo mundial fútbol no piensa dejar al aire nada. Por ello, el propio Gianni Infantino viajará a Irán para supervisar la entrada de las mujeres durante la próxima jornada del campeonato iraní.
Ya en el último partido de la Selección, en el que Irán venció a Camboya por 14-0, se permitió la entrada a unas 3.500 mujeres.