Íñigo Vicente fue fundamental en el punto de oro conseguido por el Mirandés en la visita del Eibar al Municipal de Anduva. Y es que el extremo izquierdo de 23 años anotó el segundo tanto de su equipo desde el punto de penalti.
En lo que va de temporada, el futbolista español cedido por el Athletic ya ha disputado un total de 619 minutos repartidos en nueve partidos, ocho de ellos como titular. Además, ha anotado tres tantos y ha regalado un par de asistencias de gol.
Tras el encuentro, Vicente pasó por zona mixta, donde se mostró contento con el punto conseguido: "No tengo que demostrar nada. He jugado un partido más. Hicimos un buen encuentro ante un gran equipo. Noto mucho la confianza tanto del entrenador como de todos mis compañeros. Para los futbolistas de ataque, los goles y asistencias dan mucha moral. Lo importante es que valgan para puntuar. Están saliendo bien las cosas y sacaremos buenos resultados seguro. Queremos estar arriba y hay equipo para ello".
"Hay que dar mérito a este punto. El partido se nos puso de cara, pero luego muy en contra. Vamos todos en el mismo barco y lo demostramos. Hay que quedarse siempre con lo positivo. Supimos remontar a un equipo casi de Primera División", sentenció.