El Nápoles y la Roma ya están pegaditos en la tabla. La victoria de los locales en su duelo en San Paolo hizo que ambos se quedaran con 58 puntos, marcando la sexta y la quinta plaza de la clasificación. ¿La clave? Un gol de Insigne a ocho minutos del final.
El gol se negó a ambos en la primera mitad, pero los 'azzurri' estuvieron más activos. No es que sus contrincantes no llegaran de vez en cuando, aunque las ocasiones más claras eran de los locales. Pau Torres, de hecho, tuvo que sacar las manos ante un disparo de Zielinski que pudo abrir la lata.
En la segunda mitad, el cansancio desatascó las cosas y se adelantaron los de Gattuso. Callejón, a pase de Rui, mandó la bola a la red a los diez minutos de echar de nuevo la bola a rodar y puso de cara el encuentro. Los de Fonseca supieron reaccionar y no tardaron en firmar las tablas.
Cinco minutos necesitó Mkhitaryan, gracias a una gran asistencia de Dzeko, para poner el 1-1 en el marcador y hacer muy entretenido todo el duelo hasta el final. El resultado estaba totalmente abierto y podía pasar cualquiera cosa. Y ahí es donde entran los jugadores que marcan la diferencia.
Esta vez, fue Insigne. En el 82', decidió el enfrentamiento con el gol de la victoria. La Roma ya no tuvo tiempo de responder de nuevo y los puntos acabaron en el bolsillo del Nápoles. Arde la zona alta de la tabla gracias a esta victoria, que coloca a ambos clubes con los mismos puntos.
July 5, 2020