El Inter de Milán dio un golpe encima de la mesa en el pasado mercado invernal al anunciar el fichaje de Gosens, lateral zurdo que pertenecía al Atalanta. El jugador llegó a la disciplina 'nerazzurra' en calidad de cedido con una opción de compra obligatoria por 22 millones.
El lateral zurdo no dudó en aceptar la propuesta que le llegó desde el cuadro lombardo a diferencia de la del Newcastle, el considerado a día de hoy como el club más rico del mundo tras la entrada de un fondo de inversión saudí.
Gosens, que conocía de primera mano la oferta de las 'urracas', explicó en 'Kicker' lo que le llevó a rechazar la oferta del conjunto inglés: "Pensé en el Newcastle, pero nunca me lo planteé realmente. Era humano pensar que podía ganar mucho más, pero había demasiados en contra. Habría puesto en peligro mis objetivos deportivos".
Por último, el germano avisó de que el dinero no lo es todo. "Al final de mi carrera, me gustaría mirarme en el espejo y decir: 'Aproveché al máximo'. Me parece cuestionable basar todo en el dinero. Soy un romántico del fútbol. Y en todo caso, es obvio que yo también me beneficio, en el Inter no tengo contrato de aprendiz…", concluyó.