Tres puntazos. Ese es el regalo que le hace Iriome a su nuevo entrenador, a Mehdi Nafti. Apareció en la última jugada del partido ante el Castellón, un saque de esquina, para hacer de cabeza un gol muy bonito que valió por la victoria. Pudo ganar cualquiera de los dos equipos, eso sí.
Los de Óscar Cano mostraron más profundidad en la primera mitad. Se fueron difuminando en la segunda y volvieron a encontrarse cuando Marc Mateu, que fue de menos a más, tomó los mandos de la sala de máquinas. Incluso casi marca un gol olímpico que el colegiado anuló por falta a Cantero. Más de un aficionado local examinará la repetición para comprobar si fue justo.
Los albivermellos se plantaron en Castalia con una defensa de circunstancias por las sanciones de Xavi Torres y Carlos Pita. Alende fue el más destacado por su calidad al corte y Alende, Luis Ruiz y Campabadal solventaron la papeleta, aunque no con nota: Zlatanovic y Jorge Fernández les pusieron muy en apuros a veces.
El '12', de hecho, tuvo una ocasión clara de cabeza para marcar cuando el duelo iba todavía 0-0. El '21' también asustó con un control de espuela en el área que no pudo aprovechar para generar más peligro. Rubén Díez, menos protagonista, insistió.
Pero el Lugo tenía también a sus hombres de ataque. Gerard Valentín fue el más incisivo. Barreiro le acompañó y, a pesar de que pudo estar más preciso, obligó a Álvaro Campos a actuar. La mejor intervención del meta fue a Gerard tras una volea en el área que sacó con una mano salvadora.
Fueran cuales fueran las armas de cada equipo y aunque sus argumentos se antojaran razonables para obtener la victoria, se la lleva el que más la necesitaba, el nuevo Lugo de Mehdi Nafti. Óscar Cano se queda con las ganas de prolongar el gran estado de forma de su Castellón.