Imanol Alguacil terminó en éxtasis el partido en La Cerámica. Ya lo avisaba el técnico 'txuri-urdin' en la previa, incluso quedando séptima es una gran temporada de la Real Sociedad. Pero el triunfo lo asienta en los puestos de Europa League y culmina una campaña sensacional.
La tensión en esta penúltima jornada unificada estaba en la zona de abajo, en la de descenso. Sin embargo, la cita entre el Villarreal y la Real Sociedad era fundamental por los puestos de Europa, con el Betis quinto tras ganar al Granada y el 'submarino amarillo', que se tendrá que jugar la séptima plaza, que da acceso a la Conference League, con el Athletic.
El partido tuvo un guion bastante polarizado. Minutos para uno, protagonismo para otros a continuación... La Real Sociedad, de hecho, sorprendió por su buen comienzo de partido, en el que Rulli tuvo que salvar los muebles de los suyos hasta en dos zarpazos de Isak y Sorloth, la punta de lanza del equipo realista.
Fue despertando el Villarreal de su letargo con algunas internadas de Chukwueze por banda derecha, aunque principalmente por una buena presión que incomodó la salida de balón de la Real Sociedad. Boulaye Dia avisó tras robarle la cartera a Zaldua en línea de fondo y Zubeldia estuvo a punto de cometer penalti sobre Lo Celso.
Y en el 43' llegó la obra de arte que puso en ventaja al 'submarino amarillo', en un córner perfectamente botado por Parejo y que conectó Coquelin con una volea sensacional en el aire. Un gol psicológico que la Real Sociedad combatió con otro tras el paso por vestuarios, gracias en parte a un cambio importante de Imanol: Gorosabel, por Zaldua.
De las botas de Gorosabel nació el centro que, en el minuto 56, sirvió para que Isak firmara el empate a uno. La duda está en por qué dejó pasar Rulli ese balón en el área. El sueco, más listo que nadie, remachó el cuero en el segundo palo y devolvió al partido a la Real Sociedad, que cogió los mandos del mismo a raíz de la posesión.
A los pocos minutos, un posible penalti sobre Capoue fue revisado por el VAR después de que se señalara. Illarramendi llegó algo tarde, pero el toque con su rival fue bastante poca cosa. No hubo penalti y el Villarreal perdió algo del control que tenía antes del descanso. David Silva empezó a aparecer con más espacio y las bandas visitantes fueron importantes.
Ya en el minuto 73, Isak encontró espacio por la derecha, centró al área para Zubeldia y, aprovechando un rechace, Zubeldia sentenció la remontada al marcar a placer. La Cerámica se quedó algo fría y el Villarreal no consiguió reaccionar en el tramo final en busca del empate. Los de Imanol amarraron el triunfo por 1-2 y el puesto de Europa League.