Arrancó con brío el Melilla, queriendo asumir el protagonismo desde el inicio. Sin embargo, como le sucedió en el Álvarez Claro, las ocasiones desperdiciadas no hicieron si no desperatar la bestia blanca.
Merced al paso de los minutos, el Real Madrid se fue entonando hasta coger las riendas y aceptar el correcalles propuesto por el conjunto visitante para galopar a lomos de Asensio y Vinicius.
Mientras Isco desempolvaba la chistera y se desquitaba para deleite de su afición, el 'crack' brasileño exhibía tanto vértigo como falta de puntería, desnudando a sus defensas sin batir al guardameta.
No falló, sin embargo, Asensio. El mallorquín marcó dos goles, uno a pase de Vinicius tras un espectacular desborde, y regaló el tercero a Javi Sánchez, canterano que redondeó el marcador al descanso.