A sus 34 años, Jackson Martínez está viviendo un calvario. En estos momentos, el colombiano está 'mendigando' un contrato en Portugal para continuar jugando a nivel profesional.
Estuvo en el Portimonense la campaña pasada y su contrato expiró, por lo que está libre y puede negociar con cualquiera. Pero no hay nadie interesado en él.
Esto choca si nos retrotraemos al pasado. El 'cafetero', que se salió en el Oporto, llegó a la disciplina del Atlético de Madrid el verano del 2015 por 35 millones.
Se esperaba mucho de él, pero su fichaje fue un auténtico fracaso. Cinco años después, Jackson Martínez explicó su paso tortuoso por el cuadro madrileño.
"Llegué a Madrid con una ilusión tremenda y noté que Simeone también la tenía. Expresó que creía en todo lo que yo podía darle al Atlético y trató de hacerme el jugador que necesitaba, pero no pude encajar en el sistema por varias circunstancias", empezó diciendo el futbolista en 'AS'.
"No pongo excusas, pero desearía que las cosas hubieran salido de otra manera. Aún así, agradezco a la afición del Atlético, que siempre ha sido amable conmigo. Fue una pena que me lesionara cuando me sentía más adaptado", añadió.
Por último, el colombiano aclaró su relación son Simeone y explicó lo que le faltó para triunfar. "Me faltó quedarme y jugar más. Cuando un club contrata a un jugador es porque sabe lo que puede recibir y tiene que ser paciente, pero yo no tuve esa oportunidad y eso le dije a Simeone. Le dije ‘dame partidos que yo respondo’. En el Oporto siempre jugaba... Yo respetaba su forma de pensar, nunca hubo ningún problema entre nosotros", concluyó.