Jesús Gámez: "El Zenit esa noche no sabía ni en la ciudad que estaba"

Una década. El 18 de septiembre de 2012 el Málaga CF saltaba al césped de La Rosaleda para hacer historia. Era su primer partido en la cima, en la Liga de Campeones. Lo hacía después de dejar en la cuneta de la Fase Previa al Panathinaikos griego. Y comenzaba una bonita historia con el final que ya todos saben. Pero entonces nadie sabía lo que estaba por venir. Llegaba el Zenit de San Petersburgo. Y se cruzarían por el camino el Anderlecht y el Milán, que era el cabeza de grupo. Nadie apostaba por el equipo de Manuel Pellegrini. Pero con los Isco, Joaquín, Toulalan, Weligton, Caballero, Saviola, Monreal y compañía no había techo.
Jesús Gámez, uno de los capitanes y el segundo jugador del Málaga CF que más veces ha vestido la camiseta del club blanquiazul con 293 participaciones, fue un activo importante en esa participación de la Champions. De hecho, Gámez quemó todas las etapas posibles de blanquiazul. Jugó en Segunda y llegó a los cuartos de la Liga de Campeones como malaguista tras salir de la cantera. El exjugador blanquiazul recuerda para BeSoccer Málaga en esta entrevista cómo se vivieron esos días de vino y rosas para el malaguismo. Una década después, el legado de la Champions está vivo, aunque parezca ahora muy lejano.
Pregunta: Se cumplen 10 años de una noche mágica, del primer partido del Málaga CF en la Liga de Campeones, ¿Cómo la recuerda?
Respuesta: Fue algo histórico, algo único. Yo como malagueño no sabía si podría vivir algo así con esta camiseta, pero fue algo que va a estar siempre dentro de mi cabeza, en mi corazón. Porque tampoco sabemos si volverá. Y como fue la primera vez, es algo que se queda para mí, que lo disfruté muchísimo y también la gente en La Rosaleda.
Recordemos un poco la fase de grupos. Al Málaga le tocó con el Zenit, el Anderlecht y el Milán. Era la Cenicienta al ser la primera participación en Champions…
Sí, nadie confiaba en nosotros. Pero el nivel de motivación y de confianza se demostró en el primer partido y en los siguientes. Nos clasificamos muy rápido. Le plantamos cara a todo un Milán, que nadie tampoco se lo esperaba. Y el nivel competitivo que teníamos tanto en LaLiga como en Champions hizo que la gente empezara a fijarse en nosotros.
Cómo jugaba ese equipo y había muchos jugadores de nivel…
Sí, yo creo que la confección de esa plantilla era muy buena. Había experiencia y había calidad. Se reunieron muchos aspectos para que eso sucediera de esa manera.
¿Recuerda cómo fue aquella noche ante el Zenit? Usted asistió a Saviola en el 2-0. A los 13 minutos ya ganaban 2-0. La gran noche de Isco...
Creo que al final ni nosotros nos imaginábamos que iba a salir de esa manera. Pero desde que el himno comenzó a sonar, nosotros debutábamos, teníamos muchas ganas, en casa, con la afición volcada… Yo creo que al final el Zenit, cuando se quiso dar cuenta, no sabía ni en la ciudad en la que estaba. Creo que se fue alineando de tal manera que salió perfecto.
¿Tiene algún recuerdo especial de esos primeros partidos? ¿Algún comentario, algún gesto, alguna situación…?
Lo que más recuerdo es que en ese momento, antes de empezar, no nos hacía falta ni calentar. La motivación que se vivía desde el recibimiento de la afición, desde la calle, lo que se respiraba en el ambiente era todo bueno en el vestuario. Era confianza, era experiencia, era una mezcla de emociones que todo el mundo estaba convencido de que íbamos a salir y que íbamos a hacer las cosas bien.
Ha pasado una década pero seguro que mantiene contacto con muchos de sus ex compañeros.
Sí, al final nos cruzamos en algún momento y se habla. De vacaciones o en cualquier sitio. Son momentos que se recuerdan. Son momentos durante tu carrera que no se olvidan. Y esa temporada es una de ellas.
¿Cuál es el mejor recuerdo de aquella Champions?
El himno. Escuchar el himno en La Rosaleda por primera vez.
Usted representaba en ese equipo al malaguismo de toda la vida. De las categorías inferiores al primer equipo. De jugar en Segunda a hacerlo en Champions...
Yo creo que al final rompí ciertas barreras que el canterano no lograba romper. El canterano llegaba al filial, luego al primer equipo y ahí duraba poco. Salía fuera porque no tenía sitio en este Málaga, no se valoraba al canterano en los contratos. Yo creo que rompí esa barrera y después de entonces hubo muchos canteranos que subieron, no en la situación de ahora, sino anteriormente, que era muy difícil llegar al primer equipo. Y al canterano se le empezaba a valorar porque venían equipos de fuera y el Málaga hacía una labor para que el canterano se le valorara como uno más.
Es el segundo que más partidos ha jugado en la historia del Málaga CF, detrás de Duda. ¿Entre los mejores de los 293 como blanquiazul seguro que está alguno de esa Champions?
Bueno, el segundo con más partidos pero el primero con más minutos (risas). Son miles de recuerdos. Me puedo quedar con el día del ascenso. Con el primer día de la Champions. Son momentos en los que se viven muchas cosas. O partidos por la permanencia, que se vivieron como si fueran un ascenso. Son muchos años los que yo he estado en el Málaga y muchos recuerdos.
El capítulo de Dortmund ya lo comentaremos otro día...
Eso siempre va a estar ahí. Es un recuerdo que va a estar ahí y por muchas vueltas que le demos. Aquello fue injusto. Podemos hablar de si hubiera estado el VAR... Mil historias. En una carrera, una trayectoria o una historia en un club hay días tristes. Y ese es uno de ellos.
¿Dónde habría llegado ese equipo?
No lo sabremos. Pero la confianza que teníamos en ese momento... El nivel de juego que desplegábamos... Creo que luchar, íbamos a luchar. Creo que no iban a ser unas semifinales fáciles para el Real Madrid. Pero no podemos saber ni hablar más de ello.
Su idilio con la Champions continuó también con el Atlético, con el que fue subcampeón. ¿La Champions es otro rollo, no?
Sí, fui subcampeón con el Atlético. El primero caímos en cuartos, y al siguiente en la final. La Champions es la competición estrella a nivel de clubs. Hay otro ambiente, otro nivel. Y creo que me siento afortunado por haber podido jugar la Champions.
Una lástima que el Málaga esté ahora tan alejado de estas competiciones...
Al final yo creo que no es cuestión de la situación de ahora. Esto viene de atrás. Lo hemos comentado muchas veces, que es para escribir un libro lo que pasó.
¿Qué es ahora de Jesús Gámez?
Sigo con mis empresas, mis negocios. A nivel de deporte hago deporte diariamente. Y por los campos estoy volviendo ahora porque mi hijo ha comenzado ahora, desde chiquitito. De inicio en las canteras.
La saga Jesús Gámez va a seguir entonces...
Sí, de momento sigue (risas).