Filip Jörgensen sueña con ser el primer guardameta del Villarreal. Así lo ha asegurado el joven portero sueco, de 19 años recién cumplidos. Quiere responder a la confianza brindada por el club cuanto antes.
Por el momento, Jörgensen se conforma con jugar en el filial, pero atesora cada una de las diez convocatorias del primer equipo que ha recibido. Espera que su debut pueda llegar más pronto que tarde.
Porque hay una cosa que parece tener clara: él quiere triunfar. "Confío en mis posibilidades. Este año he aprendido de los mejores cada día. Estoy preparado para dar el salto", afirmó, en una entrevista concedida a 'AS'.
"El club siempre ha confiado en mí desde el primer día. Sólo pienso en entrenar y mejorar. Ser el número 1 del Villarreal algún día. Por eso renové con un contrato tan largo. Queda mucho trabajo y tengo que aprender y mejorar mucho", continuó.
Pese a esa altura de miras, Jörgensen es humilde. "Es muy difícil ponerme una nota nota a mí mismo. Hay un montón de cosas para mejorar siempre. Estoy en una etapa de aprendizaje, tanto de compañeros como de entrenadores. Pero confío mucho en mí", advirtió.
También habló sobre su futuro internacional, pues se debate entre Suecia, con quien ha jugado en las inferiores, y Dinamarca. "Aún no he decidido. Mi padre es danés y mi madre sueca, tengo doble pasaporte, puedo ir con los dos", explicó.
Y terminó hablando de sus inicios como portero. "De pequeño era delantero, siempre me ha gustado marcar goles. pero un día en Malmö, con diez años, llegamos al entrenamiento y nos dijeron que nuestro portero se había roto el brazo. Me puse yo y desde aquel día siempre he sido portero", reveló, para finalizar.