Honores a la Juventus de Turín, que consiguió tras su victoria frente a la Fiorentina, en el Allianz Stadium, el 35º Scudetto de su historia. El octavo de forma consecutiva, demostrando que el salto entre la 'Vecchia Signora' y el resto de competidores continúa siendo abismal. En casa, ante su público y después de la desazón provocada por el varapalo europeo, la Juve volvió a sonreír.
Bien pudo hacerlo la pasada jornada, pero un once de circunstancias no pudo a domicilio con el SPAL. Todo quedó pendiente de este sábado, en el que la tropa de Allegri lamió sus heridas para llevarse una alegría que no debe ser empequeñecida. Su trayectoria en esta Serie A fue sensacional, cosechando hasta el momento solo tres empates y dos derrotas -Genoa y SPAL-.
Los números lo dicen todo. 28 victorias en 33 partidos, 87 puntos y solo 23 goles en contra. Volvió a hacer de su trabajo defensivo una virtud, este año elevado a la enésima potencia por los goles de Cristiano Ronaldo. El luso tardó en arrancar, pero cuando abrió la lata fue fundamental -faltaría más- para el título juventino. Ahora, al '7' le queda desbancar a Quagliarella de la primera plaza de la tabla de máximos artilleros.
Los 20 puntos de distancia con el Nápoles, segundo clasificado, o los casi 30 con respecto al Inter hablan a las claras de lo que fue esta Serie A, una competición que desde el primer momento fue cayendo del lado de la Juventus. El fichaje de Cristiano amplió aún más la brecha y nadie fue capaz de poner en duda el octavo entorchado consecutivo. El gran debe del equipo este año, la Champions.
Porque, aunque consiguió ganar la Supercoppa Italiana, la Juve también cayó demasiado pronto en la Coppa. Fue apartado en cuartos por un Atalanta que le pasó por encima (3-0), perdiendo la oportunidad de hacer un triplete que, inicios de campaña, no era descabellado creer que terminaría cayendo. No obstante, a Allegri -si es que continúa- le queda aún trabajo por hacer para conseguir lo máximo de su plantilla.
Pese a que parte de su hinchada recibió a la Juventus entre un clima de decepción y enfado, con pancartas puestas al revés en señal de protesta, todo tornó en fiesta. Al César lo que es del César, no se puede poner un pero a la fantástica actuación de la Juventus en una Serie A que vuelve a ser suya y que, o la cosa cambia drásticamente, volverá a tener color 'bianconero' el próximo curso.
20 de abril de 2019