Samuel Kalu, del Girondins de Burdeos, protagonizó el susto de la jornada. En el encuentro que enfrentaba a su club contra el Olympique de Marsella, el futbolista cayó desplomado al césped en el minuto 5. Rápidamente, los 21 futbolistas restantes se colocaron alrededor para que no se grabara nada.
Tras sufrir el dicho episodio, el atacante quiso volver a entrar al terreno de juego y disputar el duelo. Reapareció en el minuto 8, pero su técnico decidió sacarlo en el 14' por precacución. El gesto tanto de compañeros como de rivales recordó a la situación que vivió Eriksen en la pasada Eurocopa.
Tras caer al suelo, rápidamente llegaron las emergencias y servicios sanitarios para atender al futbolista. Finalmente, todo parece indicar que no será nada grave y que se trató de un golpe de calor provocado por las altas temperaturas en Francia.
Vladimir Petkovic dio entrada en su lugar a Rémi Oudin. El extremo salió del Vèlodrome entre los aplausos de toda la grada, gesto para destacar por parte de la afición rival.