"Kepa está triste porque no puede entrenar y se recupera de una lesión. Es mi compañero y le voy a defender siempre", espetó el guardameta rojiblanco.
A pesar de competir con él por la portería vasca, Herrerín destacó su gran relación: "Cuando se ponga bien, tanto Kepa como yo estaremos disputando el puesto como el primer día. La decisión es del míster, pero creo que haga lo que haga el equipo puede estar tranquilo".
El fichaje de Kepa por el Real Madrid era un secreto a voces hasta que Zidane se encargó de frenar la operación, cuando su llegada parecía inminente.
Aunque el propio guardameta llegó a pasar el reconocimiento con el conjunto blanco, el técnico francés se mantuvo estoico en su idea de no reforzar la plantilla en enero.