Es de bien nacido ser agradecido. Kjaer tiene muy presente esa máxima y destacó la buena actitud del Sevilla en relación a su salida del club.
"Después de la temporada pasada, mi agente y yo tuvimos una reunión satisfactoria con Monchi. Acordamos que, si aparecía una buena solución tanto para Sevilla como para mí, entonces hablaríamos de ello. El Sevilla no me presionó para que buscara otro club. Siempre dependía de lo que yo quisiera hacer", explicó.
De hecho, el central danés estuvo cerca de quedarse en el club hispalense... hasta que llegó la opción de la Serie A: "Después de nuestra gira de pretemporada por Estados Unidos, Lopetegui vino a mí y me dijo que quería quedarse conmigo y usarme".
"Así que, por supuesto, esperaba quedarme en Sevilla, que es un gran club, y estaba listo para arriesgarme con lo que Lopetegui me había prometido, pero de repente apareció el Atalanta", admitió.
"Escuché sobre el interés de Atalanta el sábado por la mañana, y luego todo fue muy rápido. Esta fue exactamente esa oportunidad fantástica que podría hacerme dejar Sevilla. Estoy muy feliz de volver a Italia, que la veo como mi segundo hogar, y jugar en la Liga de Campeones para un club de primer nivel", concluyó sobre su nuevo equipo.