Klopp tuvo que explicar en rueda de prensa, antes del partido ante el West Ham del próximo lunes, por qué decidió quitar a Mané en el descanso cuando estaba 1-0 perdiendo en el marcador.
"Hablé con él este viernes, le pregunté si estaba sorprendido y dijo "sí". No creo que tuviese una sola oportunidad, mi sincera opinión", explicó el técnico del Liverpool sobre el senegalés.
El alemán aseguró que necesitaba a un Mané que tuviese "contacto con los oponentes". "Con la situación que se creó, con ocho jugadores alrededor del árbitro... no creía que pudiéramos completar el partido con once con él sobre el campo", afirmó.
Fue más allá Klopp, que aludió a la actitud del Atlético de Madrid. "Temía que un jugador se cayese cuando Mané respirase cerca de él", aseveró el alemán después del choque, consciente del peligro que tenía el senegalés con una tarjeta amarilla.
"Está completamente bien, descansó, lo que también es bueno. Mané jugó una muy buena primera mitad y lo único que quería era asegurarse de que no le sacaran otra amarilla", confesó Klopp.
Todo ello llegó después de que los jugadores del Atlético de Madrid reclamasen la roja a Mané por una acción con Vrsaljko. El senegalés realizó una falta parecida a la que hizo cuando le enseñaron la amarilla minutos antes.