El jugador centroafricano, que llevó el brazalete de capitán en la segunda parte del partido que su equipo ganó por 0-2, era uno de los tres jugadores que estaban a un partido de la suspensión.
Los otros dos, Carlos Soler y Dani Parejo, que solo jugó la primera parte del encuentro, no fueron amonestados en este encuentro, en el que la única tarjeta para los valencianistas fue la mostrada a Kondogbia.
Una amarilla que le fue mostrada por perder tiempo a la hora de poner en juego un balón tras una falta sobre Garay que le costó la amonestación a Burke.
Esta amonestación le llega a Kondogbia en medio del revuelo formado por Ramos tras reconocer haber forzado la suya la noche antes, ante el Ajax en la Champions. Si la UEFA considerase que la forzó, podría abrirle expediente como al capitán del Madrid, lo que le expondría a una sanción mayor, de hasta dos partidos extra.