La Juventus de Turín certificó de la peor manera posible su más que preocupante inicio de curso. Y es que la 'Vecchia Signora' cayó por 2-1 ante el Nápoles en un duelo que comenzó ganando con gol de Morata.
Sin embargo, Politano igualó la contienda y puso en el marcador un 1-1 que parecía ser definitivo a medida que el encuentro se acercaba a sus instantes finales. Pero los últimos minutos guardaban una dura sorpresa para la Juventus.
Y es que en el minuto 85', a la salida de un saque de esquina, Szczesny no logró despejar del todo bajo palos un remate del conjunto partenopeo, dejando el balón muerto a escasos centímetros de la línea.
La situación fue aprovechada por un Kalidou Koulibaly que, en boca de gol, solo tuvo que empujar el esférico para poner el a la postre definitivo 2-1 y desatar de paso la locura entre la afición napolitana.
El zaguero celebró a lo grande junto a sus compañeros un tanto que deja a la Juventus muy tocada, pues el equipo de Massimiliano Allegri tan solo suma un punto tras tres partidos disputados.