Kuyt salió del Feyenoord en 2006. Se hizo grande en Liverpool, jugó finales de Champions y del Mundial con Holanda, lo quiso el Barça. Un obrero del fútbol que siempre jugó allá donde jugó. Cuando le faltó calidad le sobró con el arrojo.
El atacante, tras pasar por el Fenerbahçe turco, volvió al club donde empezó a forjar su carrera. En un campeonato dominado en las últimas décadas por Ajax y PSV, la victoria del Feyenoord es la de Dirk Kuyt.
Es totalmente incónico que Kuyt marcara tres goles para lograr el triunfo que necesitaba el Feyenoord para recuperar el trono holandés 18 años después. A sus casi 37 años, Kuyt agranda su leyenda.
La lágrimas de Kuyt, que se tiró a la grada para festejarlo con su afición, son las de toda Rotterdam. El Feyenoord recupera el cetro y Dirk es el rey.
.@Kuyt احتفاله مع الجمهور #feyenoord pic.twitter.com/4eAD83e0Ag
— Anwar #Albatin (@AN_WR) 14 de mayo de 2017