"Es muy gracioso, siempre está metiéndose con todos, en el sentido de las bromas, de picar, de jugar...", reveló Montoro.
Y contó una anécdota. "A mí hace poco, como yo tenía el pelo teñido, me decía que me iba a cortar el pelo sino me lo quitaba cuando fuese con ellos convocado", contó.
No sólo Diego Costa le acogió como uno más. Montoro explicó que el vestuario se vuelca con los canteranos. "Las veces que estoy con ellos, me han acogido muy bien", continuó.
Porque los rojiblancos son una auténtica piña y se vuelcan para que los canteranos se sienta como en casa. "Te dan apoyo, te ayudan, te chillan, te corrigen… eso te hace estar mucho más a gusto en un vestuario que no es en el que estás a diario", concluyó.