Atlético Nacional está pasando por un momento delicado. Los resultados a nivel deportivo no están acompañando y las cosas en el vestuario no marchan nada bien. No hay que irse muy lejos para comprobarlo.
En el choque contra Deportivo Cali, Dayro y Lucumí acabaron discutiendo por el lanzamiento de una falta. La trifulca acabó con el segundo siendo expulsado por el árbitro tras propinarle un cabezazo a su compañero.
No obstante, la afición, al ver lo que pasó en el campo, pidió la cabeza del ex de Tijuana por las peleas con varios integrantes de la plantilla 'verdolaga'. Al final, Nacional tomó la determinación y lo despidió sin contemplaciones. Por su parte, Lucumí fue suspendido ocho días.
La Dimayor, el organismo que rige el fútbol colombiano, decidió entrar de oficio y determinó la misma sanción para los involucrados: tres encuentros de suspensión y condenados a pagar una multa de 416.000 pesos colombianos.