La victoria rompió la racha de dos derrotas seguidas del Leeds y le devolvió a lo más alto de la tabla. Pero en el descanso saltó la verdadera noticia.
Marcelo dio entrada a Roberts para la segunda parte, ya con 1-0 en el marcador. Pero se arrepintió a la media hora y volvió a mandar al jugador al banquillo.
Y así lo explicó el técnico, que no rehuyó la autocrítica: "El que se equivocó fui yo, tuve que corregir la decisión porque vi mal lo que iba a pasar en el partido. Klich defiende menos que Shackleton y Robert menos que Klich, mientras que el partido exigía un trabajo defensivo muy grande. No tuve otra opción que tomar la decision que tomé, me pareció que era la unica forma de sostener el encuentro".
"El cambio no tiene que ver con la actuación de él, que se esforzó muchísimo. Sino que, pasados los 15 minutos, se convirtió en otro partido y me vi obligado a buscar para la mitad de la cancha un jugador más agresivo que creativo", concluyó.