Disputaba un balón dividido con Erik Lamela, y, sencillamente, midió mal. Es cierto que el partido se había empezado a poner un poco brusco, pero no hasta ese límite.
El argentino controló el balón y, cuando quiso llegar Aké, el esférico sencillamente no estaba donde iba a poner su pierna. Aké entró con la plancha por delante y propinó un doloroso plantillazo a Lamela a la altura de la cadera.
Nathan Ake was sent off for the 1st time for this… Should he have stayed on the pitch?
Courtesy: BeIn Sport pic.twitter.com/l54OAGkPC5
— fanatix (@therealfanatix) diciembre 28, 2015
El jugador del Tottenham se repuso del golpe, pero su agresor se llevó su primera tarjeta roja directa de su carrera, algo que seguro que dará que pensar esta noche al joven defensa holandés.