La carrera de Édgar Badía, el portero que ha sido un descubrimiento para aquellos que no le conocían en Primera, parece un boceto de una montaña rusa. Salió de la cantera del Espanyol, con el que llegó a debutar en unos octavos de final de Copa del Rey, ante el Córdoba, en enero de 2012.
Unos meses antes, en verano de 2011, se ganó el derecho de esa oportunidad con el cuadro 'perico'. En el Europeo Sub 19 con España, Édgar Badía fue el portero de 'la Rojita' que levantó el trofeo frente a República Checa en la final en un equipo con jugadores como Pablo Sarabia, Gerard Deulofeu, Paco Alcácer, Dani Carvajal, José Campaña o Álvaro Morata.
Sin embargo, a nivel de clubes no encontró la oportunidad que buscaba. Del filial del Espanyol se marchó al del Granada, donde le surgió la oportunidad de recalar en el Reus. Allí disfrutó de varias temporadas en Segunda División, hasta que los problemas extradeportivos el cuadro catalán le obligaron a una abrupta salida.
Y el Elche fue su nido. En el Martínez Valero no tardó en hacerse con la titularidad en su primer curso. Y en el segundo, en la temporada pasada -la del ascenso-, el portero fue uno de los pilares para que el por entonces conjunto entrenado por Pacheta lograra el sueño de volver a Primera División. Badía fue esencial... y sus números no mienten.
En ese año en la categoría de plata hizo historia: fue el portero que más paradas hizo por encuentro (3,39) y el que más intervenciones tuvo que ejercer (3,40) para un equipo que ascendió tras pasar por el 'play off'. Ahora, de la mano de Almirón, es también inamovible del once. Y sus paradas también dan puntos en la división de oro.
El Elche suma diez puntos en los cinco primeros partidos (debe jugar esta semana frente al Betis y el pendiente que tiene ante el Barça) y Édgar Badía ya ha logrado dejar la portería a cero en tres ocasiones (Eibar, SD Huesca y Alavés). A sus 28 años, todavía le da tiempo a hacer carrera en Primera...