El Barça practicó un futbol total pocas veces visto esta temporada este domingo en Anoeta. Los azulgranas golearon 1-6 a una Real Sociedad que en ningún momento del encuentro opuso resistencia ante la superioridad de su rival.
Dembélé fue uno de los goleadores del encuentro. El galo protagonizó una gran jugada individual que finalizó con un zurdazo inapelable al palo largo de la portería defendida por Remiro.
Sin embargo, el francés también estuvo en el centro de la polémica del choque. En un lance del encuentro, el colegiado señaló una falta de Zubeldia sobre el extremo sobre el 40' de la primera mitad.
Los futbolistas donostiarras protestaron airadamente sobre la decisión arbitral. Una queja que tuvo argumento una vez vista la repetición de la acción, en la que es el propio Ousmane es el que le da una patada al jugador de la Real, aunque sin intención, ya que el azulgrana solo buscaba disputar una pelota dividida.
Y por si fuera poco, de dicha falta salió el segundo gol del Barça. Dest, que acabó la noche con un doblete, puso el 0-2 tras una gran asistencia de Messi.