Marruecos ha sido la sorpresa del Mundial. Se ha mostrado implacable y solo ha recibido un gol en contra en lo que va de torneo. Se merece más que nadie estar en las 'semis'.
A Regragui todo le ha salido a pedir de boca. Ni las bajas de Aguerd y Mazraoui pasaron factura a su equipo porque su planteamiento no tiene fisuras.
La fortaleza de Marruecos es que no hay diversos planes, solo uno. Juegue quien juegue, ya sean habituales o menos, todos tienen el mismo papel y eso va a su favor.
Attiat-Allah y El Yamiq ocuparon los puestos de Aguerd y Mazraoui y, según 'Marca', al menos el jugador del Valladolid parece que volverá a ser titular contra Francia. Regragui sabe, por lo que ha visto hasta ahora de él, que va a cumplir.
Mientras, Attiath-Allah tiene claro que, si tiene otra oportunidad de jugar, no va a defraudar a Regragui. "Quiero darle las gracias por confirmar en mí. Jugar en un partido contra Portugal ha sido histórico para mí, pero aún tenemos más que dar", dijo tras la clasificación de Marruecos para las semifinales.
Regragui ha conseguido que su guía sea infalible. Para qué tener plan 'A', 'B', o 'C' cuando es mucho más efectivo que todos sean su primera opción.