Era su oportunidad. La ocasión de demostrar a Zidane que él es el titular, y que debe seguir siéndolo por mucho que el Madrid haya desembolsado casi 50 millones de euros en Mendy.
El lateral francés se lesionó al poco de llegar al Madrid y se ha perdido casi toda la pretemporada. Marcelo, su rival por el puesto del carril zurdo, se puso las pilas e hizo olvidar de un plumazo que tenía un competidor.
La pretemporada de Marcelo, sobre todo en lo referente a la ofensiva, ha sido impactante. Ha participado en casi tantos goles como Benzema, y ha tirado del carro cuando su equipo lo necesitaba.
Marcelo lució galones y dio un paso al frente. No quiere volver al banquillo al que le condenó Solari, y ha trabajado duro para convencer a Zidane de que su puesto está en el once titular. Un once en el que le veremos más como carrilero que como lateral, visto lo visto.