El conjunto helvético saltó al césped del moderno estadio de San Petersburgo en torno a las 17.30 hora local, con varios de sus jugadores jugueteando con el balón, especialmente Xherdan Shaqiri.
Tras una reunión de algunos minutos en el círculo central del terreno de juego, en el que se escucharon algunas risas en el estadio vacío, la 'Schweizer Nati' comenzó a hacer algo de carrera sobre el césped.
Fue en ese momento cuando se desató un diluvio que resonaba en la cubierta del millonario estadio de San Petersburgo, ubicado en la isla Krestovski de la 'Venecia del norte' rusa.
Los jugadores acabaron en una esquina realizando rondos. Mientras, las áreas pequeñas estaban protegidas por unos plásticos, tal y como ocurrió en el entrenamiento de la mañana de su oponente, Suecia.
Suecia y Suiza se medirán este martes por un puesto en los cuartos de final del Mundial, en el que el ganador se enfrentará al que ganador del Colombia-Inglaterra que se disputará en Moscú.