En el mundo del fútbol siempre ha existido la controversia de si ya está todo inventado o no. En el fútbol modesto de Polonia ponen a prueba este dicho con una forma muy peculiar a la hora de defender lanzamientos de falta directa.
En un encuentro de una Liga no profesional del país mencionado se presenció una maniobra táctica que llamó la atención por su originalidad para defender un tiro libre.
El equipo que intentaba evitar el gol, decidió no colocar ninguna barrera de jugadores y, en su lugar, fue el portero el que se situó en solitario como primer interceptor.
Por otro lado, varios defensores se colocaron bajo la portería, en este caso con éxito, pues uno de ellos fue el que termina despejando el lanzamiento. A priori, la idea no parece mejor que la convencional, pero nunca se sabe en el mundo del fútbol si veremos esta manera de defender en el balompié profesional.