Partido, de fútbol por llamarlo de alguna forma, entre Fuenlabrada y Eibar. Un frío Fernando Torres no tuvo la oportunidad de entrar en calor, ya que ambos conjuntos empataron sin goles.
El conjunto local salió con algo más de ganas e insistencia que su rival. Sin embargo, las ocasiones llegaron a cuentagotas y las interrupciones fueron la tónica de la mayor parte del duelo.
Fruto de tantas faltas, el colegiado tuvo que mediar en varios momentos del partido e incluso sacar a pasear las cartulinas amarillas antes de tiempo. En la recta final de los primeros 45 minutos, el Eibar salió de su cueva e intimidó un poco más a Altube.
El comienzo del segundo acto hizo atisbar que las ocasiones iban a aumentar considerablemente. No obstante, tan solo fue un espejismo mostrado por los dos equipos, ya que solo fueron dos destellos.
Stoichkov cabeceó tras el centro de su compañero, aunque ni siquiera fue a puerta. Ni un minuto después, el recién entrado Dago cabeceó de forma contundente y la pelota se marchó desviada a escasos centímetros del palo.
Tras estos dos acercamientos, el partido volvió a su parsimonia habitual. El cansancio también hizo efecto en las piernas de los jugadores y salir con el balón jugado costó más de lo esperado.
Además, tanto Fuenlabrada como Eibar hicieron honor a su buena defensa, sin dejar espacios a los contrarios. El contragolpe fue el medio más utilizado para llegar al gol, o al menos, intentarlo.
En los últimos diez minutos, el Fuenlabrada tuvo un fogonazo de luz y se adelantó por mediación de Anderson. Sin embargo, el futbolista se encontró ligeramente adelantado y el trencilla señaló el fuera de juego.
No hubo tiempo para más y Fuenlabrada y Eibar firmaron el reparto de puntos en un frío Fernando Torres en el que hubo muy poco fútbol.