Jon Pérez Bolo inició una semana viajera que concluirá este domingo al mediodía con el encuentro que cierra la primera vuelta de la Liga en Almería, desplazando a todos los jugadores salvo el lesionado Carlos Bravo.
A pesar de no haber adelantado sus intenciones, todo hace presumir que el entrenador utilice la competición copera para dar minutos y oportunidades a los menos habituales y, ni tan siquiera la ausencia por sanción ante el Almería de dos pilares básicos, como el extremo Isi Palazón y el centrocampista Pablo Larrea, garantizan su presencia mañana en el once inicial.
El reciente amistoso disputado en El Barco de Valdeorras (Orense) puede ser el banco de pruebas para el equipo que presente en tierras ibizencas, aunque la entidad del rival sea mayor que la de los gallegos, dada también su gran temporada en la categoría de bronce a pesar de ser un recién ascendido.
La Ponferradina llega a esta eliminatoria, a partido único, después de romper frente al Deportivo de La Coruña (2-0) una racha de cinco jornadas sin ganar en Liga, mientras que su rival lo hará tras ser goleado en su visita a Mareo ante el Real Sporting de Gijón B (6-0), aunque reservara algunos jugadores precisamente para buscar una sorpresa que ya no lo es tanto como se demostró en la primera jornada de Copa del Rey.