La pretemporada se le ha torcido a la Roma en su segundo partido. Tras arrasar al Latina hace seis días, el conjunto capitolino se midió a un rival con más enjundia, el Avellino, de la Serie B.
Pero este último amistoso antes de irse a jugar la ICC no ha salido como esperaba la Roma. Necesitó 57 minutos para perforar las redes rivales, y, para colmo, terminó empatando. Patrik Schick adelantó a la Roma al poco de comenzar el segundo periodo, y cuando la victoria parecía segura, el palo.
Un desbarajuste defensivo en el tiempo de añadido permitió a Fabrizio Paghera marcar el que quizá sea el gol de su carrera. Recibió en la frontal y se sacó un zapatazo de la manga, raso y ajustado al poste, al que Daniel Fuzato, quien entró a la hora de partido por Antonio Mirante, no llegó por centímetros.
Quizá Alisson Becker tampoco hubiera llegado a ese balón (porque no hubiera jugado este partido, entre otras cosas, al estar de permiso por haber jugado el Mundial). Quizá Mirante sí hubiera alcanzado la cepa del poste. Quizá...
20 de julio de 2018