Le podemos llamar la suerte del campeón o la justicia del VAR, pero la realidad es que América de Cali ofreció su mejor cara en una primera parte espectacular, en la que dominó de principio a fin, pero la 'Mecha' se apagó en la segunda parte.
En los primeros 45 minutos, los de Juan Cruz Real fueron realmente superiores a sus rivales y conectaron con su juego, algo que no pudieron hacer en la ida, en la que estuvieron neutralizados por el gran plan táctico de Perea.
Sin embargo, en el inicio de esta vuelta se vio a otro América, que se gustó y se divirtió con muchas ocasiones claras en la portería de Viera, que cuajó una gran actuación. Pero cuando no pudo evitar más lo inevitable, en el 31', Sánchez abrió la lata para poner el 0-1 en el marcador y desatar la locura visitante.
El tanto no sirvió para otra cosa que para darle alas a los actuales campeones, que buscaron el segundo hasta encontrarlo cerca del final del primer tiempo, en el 39'. El árbitro señaló la pena máxima a favor de la 'Mecha' y el gran 'killer' del equipo, Adrián Ramos, que asistió a Sánchez en el primero, no falló y puso el 0-2. Con este electrónico, el encuentro se fue al descanso.
Se cambiaron los papeles inesperadamente
En una segunda mitad que pilló por sorpresa a propios y a extraños, Junior salió como una moto que pasó por encima de los vigentes campeones. En menos de 15 minutos de juego, el VAR anuló dos goles a los 'Tiburones', lo que mermó la moral del equipo.
El primero, en el 51', tras un fuera de juego de Teófilo Gutiérrez, y el segundo, en el 58', por otra posición ilegal que echó a perder la diana de Fuentes. Los visitantes se salvaron por los pelos y la suerte les siguió sonriendo cuando el colegiado señaló penalti a favor de Junior pero el videoarbitraje le mandó a ver la acción y finalmente lo anuló. Dos goles anulados y un penalti que se rectificó. Suerte de campeón con un toque de VAR.
A pesar de los grandes varapalos psicológicos que se llevaron los de Perea, en el 71', Miguel Ángel Borja recortó distancias en el marcador tras hacer buena una asistencia de Teófilo, lo que tensó al cuadro escarlata, que tuvo que aguantar el resultado hasta el final.
Los locales sacaron orgullo y fe a partes iguales para tratar de poner un empate que llevaría a los penaltis, pero remó y remó y quedó en la orilla de la final del Apertura Colombiano, en la que estará nuevamente al América de Cali, que buscará revalidar su título ante Santa Fe.