Un jugador al que llamaban 'Discoteca' aterrizaba en 2015 en Avellaneda. Racing jugaba la Copa Libertadores y el uruguayo era un proyecto de futuro interesante que ya tenía un buen presente.
Su gusto por salir a los locales de fiesta a bailar le valió su apodo. Todo tenía muy buena pinta, hasta que en un partido ante Huracán se rompió los ligamentos cruzados de la rodilla.
Se recuperó a tiempo para le final de la temporada, pero Racing no ejerció la opción de compra que tenía sobre él. A partir de ahí, todo se torció para él.
Tras pasar por equipos como Jaguares, Guaraní, Unión La Calera o Deportivo Pasto. Ahora milita en Rampla Juniors. Está casado y con un hijo y durante una entrevista a 'Ovación' aseguró que ha madurado y los tiempos alocados llegaron a su fin.