La UD Logroñés se quedó con la miel en los labios en su partido en casa contra el DUX. El conjunto riojano tenía la oportunidad de sumar su cuarta victoria consecutiva, pero se tropezó con el equipo de Alfredo Santaelena, que se llevó un punto muy trabajado.
El partido comenzó con un penalti sobre Fer Cano a favor de los locales, que fue transformado por Iñaki. El extremo puso el balón en el punto fatídico y no se puso nervioso a la hora de enviar el balón al fondo de las mallas. No obstante, el combinado madrileño no se arrugó y tuvo varias ocasiones muy claras.
En el minuto 33, Alberto Gil la cruzó ante la salida de Serantes y el balón se estrelló en el poste. Fue el preludio del gol visitante, ya que tan solo un minuto más tarde llegó un nuevo penalti, esta vez para los visitantes. Rubén Ramos cogió la pelota y no falló para poner las tablas en el marcador.
En la segunda mitad, el equipo de Mere Hermoso lo intentó por todos los medios, pero el DUX aguantó bien las embestidas locales. El partido murió con una doble ocasión para los riojanos en el último minuto, pero que fueron salvadas por la defensa visitante.
Con este resultado la UD Logroñés frena en su ascenso hacia los puestos de 'play off', mientras que los madrileños se mantienen en la zona media de la tabla y suman un punto importante para alejarse del descenso.