En un amistoso que disputaron este domingo Luxemburgo y Madagascar, Vincent Thill abrió el marcador con una rosquita deliciosa.
El Luxemburgo armó una contra, la recibió en el lateral del área y la coló en la otra escuadra, lejos de las manos y la estirada del portero.
Un golazo que retrata bien a Vincent Thill, un jugador de 19 años acostumbrado a estas joyas, aunque irregular y poco constante.
Thill pasó a la historia como el primer jugador nacido en los años 2000 en debutar en una de las cinco grandes ligas. Lo hizo con el Metz en septiembre de 2016. Pronto se le empezó a relacionar con Bayern, Barça, Madrid...
Claro que en el Metz, que bajó a Ligue 2, no se ha consolidado. Fue cedido al Pau, de National, la Tercera de Francia. Ha anotado 12 goles en 29 partidos.
2 de junio de 2019