El triunfo se lo llevó Cobresal con un valiosísimo 0-2 que les vale para poder respirar en la tabla. Pero la escena insólita se dio minutos antes del pitido final.
En un saque de puerta de Sebastián López, portero visitante, desde la grada cayó un objeto que no llegó a impactar en el arquero, que se lo mostró al árbitro. Para su sorpresa, se trataba de un limón.
Deischler, colegiado del partido, se dirigió a la banda para entregar al objeto. En esa zona tuvo que retirar también un paquete de patatas fritas que había caído desde el tendido.
Finalmente, Cobresal se llevó los tres puntos de su visita a Colo Colo, que pierde fuerza en su pelea por recortar puntos a Universidad Católica.