Según desveló el diaro 'El País', la hecatombe del Camp Nou empujó al Real Madrid a contactar con Antonio Conte de manera urgente. Sin embargo, desde el club blanco tantearon la incorporación con una oferta a la baja que encendió al italiano.
En este sentido, el citado medio sostiene que las declaraciones de Sergio Ramos, adviertiendo que "el respeto se gana no se impone", no hicieron si no espolear a un Antonio Conte crecido ante la delicada situación que atravesaba el Real Madrid tras el 5-1.
Bajo este contexto de crispación y frustración blanca, el técnico italiano optó por tirar por todo lo alto, fijando cinco condiciones desorbitadas. En lo económico, Conte exigió un sueldo superior a los diez millones de euros anuales, así como más años de contrato garantizados de los que le ofecieron.
En la parcela deportiva, el italiano solo aterrizaría en Chamartín acompañado de cinco ayudantes y con capacidad ejecutiva absoluta para remodelar la plantilla "de manera inmediata" en enero. Grosso modo, Conte quería el mando del club aprovechando la crisis de liderazgo.
Sin embargo, Florentino Pérez frenó el ímpetu del italiano y descartó su fichaje para apostar por Santiago Solari, quien comenzó como técnico provisional y, merced a los buenos resultados, se ha erigido como candidato a dirigir al Real Madrid.