Kepa Arrizabalaga ha renovado ya su contrato con el Athletic hasta 2025, con una cláusula de rescisión de 80 millones de euros. Por lo tanto, no fichará por el Real Madrid.
Un final inesperado a un culebrón que viene dando vueltas en las portadas de todos los medios deportivos desde hace ya meses. Pese a que tenía pie y medio dentro del Santiago Bernabéu, Kepa se cansó de esperar a los blancos y decidió darle el sí a su equipo.
Pero, ¿cuáles han sido las claves de esta inesperada renovación? La primera la ha protagonizado el propio Zidane, tras repetir varias veces en rueda de prensa que no llegaría ningún jugador a Madrid en el mercado invernal.
Además, 'AS' asegura que Kepa recibió una llamada del Madrid comunicándole que no iba a fichar en enero, una llamada que fue clave para que el guardameta español dejara de insistir por los 'merengues'.
En Bilbao, la situación de Kepa era insostenible, lesionado y sin poder entrenar con los suyos, sin saber qué sería de su futuro y con 'Zizou' dejando claro que el Real Madrid no necesitaba otro portero.
Por eso, el mismo medio asegura que la familia del guardameta decidió hablar con él y aconsejarle que lo mejor para su presente y su futuro era aceptar la oferta de renovación del Athletic.
Así, con la negativa de Zidane y los deseos de su familia de que se quedara en Bilbao, Kepa decidió aceptar la renovación y estampar su firma en un nuevo contrato rojiblanco.