En el encuentro disputado en el Municipal de Alaró entre Alaró y Collerense, correspondiente a la categoría infantil, se produjo un hecho muy bochornoso.
Unos padres saltaron al terreno de juego después de que un jugador del Alaró le propinó una patada a destiempo a un contrario. Este suceso ha provocado la indignación en el fútbol base.
El presidente del Alaró, Llorens Guardiola, dijo en 'Cope' lo siguiente: "Sentimos vergüenza ajena. Teníamos que tomar una decisión efectiva y por eso hemos retirado al equipo. Los padres no han entendido la esencia del fútbol base. Da pena ver lo afectados que están los niños".
Por su parte, el máximo mandatario del Collerensem Tomeu Verd, fue más allá. "Hemos expulsado a dos niños y a dos padres, sólo a los que están involucrados en la pelea. Es injusto expulsar a los hijos por lo que han hecho sus padres, pero se tienen que tomar medidas drásticas", explicó.