Cuando los sueños se cumplen, la alegría es máxima. Después de varias idas y venidas, Pjanic se convirtió este lunes en nuevo jugador del Barça.
El conjunto azulgrana pagó 60 millones por un futbolista que ansiaba llegar al Camp Nou. No hay más que ver lo que pasó en la celebración de su fichaje.
Pjanic, rodeado de familiares y amigos, no aguantó las lágrimas y rompió a llorar en el hombro de su padre, que trató de calmarlo.
Las camisetas del Barça también estuvieron presentes en una fiesta en la que reinó la música tradicional de Bosnia.
El de Tuzla, que dirá adiós a la Juventus cuando finalice esta temporada, ya ultima su traslado al conjunto azulgrana.
Miralem Pjanic hizo una fiesta privada con motivo de su traspaso al Barcelona. El bosnio se emocionó y lloró al lado de su padre.
— Juan Diego Osorio Villate (@juandiosorio7) July 2, 2020
Un sueño cumplido. pic.twitter.com/cN18cE3F8V