Campeón del mundo con Francia en 2018 y en grandes equipos como Valencia, Sevilla o Marsella a lo largo de los últimos años, el veterano Adil Rami ha vivido este curso una de sus experiencias más intensas en el Boavista.
Pese a que en los últimos tiempos ha sido más protagonista por lo que se hablaba de él fuera del campo que dentro del mismo, el zaguero se ha dejado la piel por el club portugués.
Tal ha sido su nivel de implicación que, tras lograr de manera matemática la permanencia en la élite del fútbol luso, Rami rompió a llorar ante las cámaras de televisión.
El francés, emocionado por mantener la categoría, no pudo contener las lágrimas en la clásica entrevista tras el encuentro. Y es que pese a tener un Mundial y títulos europeos en su palmarés, Rami sabe valorar lo que supone una salvación.
May 20, 2021