El atacante del Al Ain disputó por primera vez un partido en el Campeonato del Mundo ante la atenta mirada de su mujer y su hijo, que estaban presentes en la grada.
El protagonista fue el más pequeño, que no pudo contener las lágrimas al ver a su padre debutar en el Mundial. Las mismas fueron captadas por la esposa del delantero, que lo compartió en sus redes sociales.
"Nuestro niño viendo a su héroe jugar en la Copa del Mundo. Todo tan bello y puro. Esta es la mejor manera de describir lo orgullosos que estamos de ti, Marcus", comentó junto al vídeo la mujer del jugador, Josefine Berg.