El año transcurrido en el fútbol argentino tuvo como aliciente el surgimiento de buenos jugadores, que prometen seguir brillando en sus clubes o en sus futuros destinos.
El primero, y más destacado de ellos, fue Matías Vargas. El 'monito' comandó, junto al experimentado Mauro Zárate, la levantada final de Vélez Sarsfield. En total, jugó 25 encuentros, aportando cinco goles y 10 asistencias. Además, demostró su gran calidad técnica con varios lujos y regates. Una perla a seguir que tiene sólo 21 años.
En el mismo equipo, surgieron dos volantes más, que dieron que hablar en el torneo doméstico. Lucas Robertone (21 años) es un mediocampista que supo explotar la banda derecha, mientras que Santiago Cáseres (21) es un mediocentro que dotó de equilibrio y juego al 'fortín'.
Dos delanteros fueron novedad en diferentes fines de semana y se proyectan a nivel internacional para los próximos periodos. Claudio Spinelli y Nicolás Reniero son dos potentes atacantes, que hicieron temblar a las defensas contrarias. El jugador de San Martín (San Juan) anotó 7 tantos y el de San Lorenzo colaboró con 4 conquistas.
En el club de Boedo, tuvo altos rendimiento otro joven profesional. Cristian Barrios (20) aportó velocidad y gambeta al sector ofensivo del 'ciclón'. Con apenas 156 centímetros de puto talento, llegó a ganarse un lugar en el once inicial de Claudio Biaggio.
Un jugador que se consolidó en el transcurso de los 12 meses, fue Matías Zaracho (20). El número '19' defendió los colores de Racing Club con sacrificio y despliegue físico, agregando colaboración en el sector ofensivo. Lo siguen de cerca varios conjuntos europeos, entre los que se encuentra el Sporting de Portugal.
La clasificación continúa con dos volantes centrales. Alexis Mac Allister (19) y Jalil Elías (22) fueron importantes piezas para Argentinos Juniors y Godoy Cruz respectivamente. El primero de ellos se caracteriza por ser más técnico y ofensivo; en cambio, el segundo se centra en la recuperación del balón y el relevo de sus compañeros.
Por último, aparecen Julián Carranza (18) y Nicolás Fernández (22). El 'crack' de Banfield es uno de los menores que han disputado la competición, sin embargo anotó cinco tantos y gravitó en el ataque del 'taladro'. El hermano de Brian y Leandro fue la sensación de Defensa y Justicia durante gran parte del certamen, acumulando ocho perforaciones a los arcos contrincantes.