Lautaro le quita la miel de los labios al Milan

El Inter abrió en San Siro la jornada 36, en un partido que se presentaba como un trámite sobre el papel para un equipo que se juega levantar el 'Scudetto'. Pero a estas alturas, la Liga Italiana no repara en sorpresas y el equipo, con un más que determinante Lautaro, tuvo que remontar un 0-2 en contra para seguir en la lucha por ser campeón.

Nadie lo esperaba, seguramente ni los propios jugadores del Empoli, pero a la media hora de partido iban 0-2 mandando en el luminoso gracias a los tantos del italiano Piamonti y del albanés Asllani, que dejaron mudo a San Siro. Un estadio que veía cómo se les escapaba el 'Scudetto' de manera definitiva ante un equipo de la zona media-baja de la tabla. La derrota, a falta de dos jornadas, era un golpe demasiado duro de encajar.

Pero si algo ha demostrado este Inter es personalidad y entereza. Los de Inzaghi siguieron con su plan y cogieron el rumbo del partido. El italiano Federico Dimarco señaló el camino con un centro que, con mucha fortuna, rebotó en el defensor italiano del Empoli Romagnoli y acabó entrando. San Siro comenzó a creer. Y Lautaro se erigió profeta de la noche.

Cuatro minutos después, al ocaso del primer acto, el ariete argentino enganchó una volea desde el punto de penalti directa al fondo de la portería en lo que en fútbol se conoce como un 'gol psicológico'. En cuatro minutos igualaron el marcador. San Siro respiró, la remontada estaba más cerca.

Todo quedó en un susto

Salió el Inter mucho mejor en la segunda mitad. Dominó en el centro del campo y tuvo las ocasiones. No podía repetirse lo del principio del encuentro, en el que pudieron encajar más goles. El gol estaba cerca y, de nuevo, Lautaro, imparable desde el princpio de abril, firmó la remontada.

Con San Siro incendiado, Lautaro rescató un rechace de la defensa del Empoli y empaló, otra vez, una bolea al primer toque que fue centrada, pero tan fuerte que no dio tiempo a reaccionar al guardameta visitante. Objetivo cumplido y remontada conseguida gracias al 19º tanto del 'Toro', que se acerca peligrosamente al serbio Dusan Vlahovic, con 23.

Los últimos minutos del choque fueron un carrusel de ocasiones para los interistas. Fueron un martillo, no había manera de pararlos, hasta que el chileno Alexis Sánchez anotó el gol definitivo tras una gran jugada del bosnio Edin Dzeko.

El Inter se vio sorprendido por un valiente Empoli, pero reaccionó y consiguió la victoria. Ahora se pone virtualmente líder de la Serie A con 78 puntos, a la espera de lo que haga el Milan -con 77-, a domicilio, ante el siempre complicado Hellas Verona del 'Cholito' Giovanni Simeone.

Los de Empoli, por su parte, se quedan en 14ª posición y, salvo sorpresa, salvados.