La sinrazón se está apoderando de las últimas semanas de Neymar en Francia. En virtud de esta información, el club que preside Nasser Al-Khelaïfi habría fijado una cantidad prohibitiva para todo aquel que quisiera a su estrella.
Una tasación que no casaría con las últimas palabras del presidente del PSG, que había mostrado su descontento con el brasileño y le habría abierto la puerta de salida.
De hecho, ese mensaje lo que vendría a decir precisamente es que Neymar es instransferible en la actualidad.
Aunque, vistos los precedentes, también una manera de sacar músculo ante el Barcelona, una situación que se ha dado recurrentemente cada vez que el club azulgrana se ha fijado en uno de sus futbolistas.
La entidad que preside Josep María Bartomeu habría cambiado su estrategia y ahora sí apostaría por su ex futbolista.
Para ello, sería capital la posibilidad de transferir el acuerdo por Griezmann al PSG, de manera que el delantero rojiblanco se marchara al PSG y ello abaratara sensiblemente el precio a pagar por Neymar.
La valoración económica que el Paris Saint-Germain le ponga al 'verdeamarelho' debería ser el principio de su fin en el Parque de los Príncipes. Sin embargo, si se aferra a esos 300 millones será imposible que pueda salir de allí.
Porque, además, el club que lo quisiera tendría que asumir el alto coste de su ficha, que a día de hoy se acerca a los 40 'kilos' por temporada.