Había dos objetivos encima de la mesa de La Cerámica este sábado, dos confirmaciones: una, por Europa; la otra, por la permanencia. Ganó la ambición del Villarreal a la estabilidad de un Levante que, pese a ciertos errores defensivos, plantó una batalla muy intensa en el derbi.
La dinámica del Villarreal es muy positiva. Los de Calleja están logrando sumar a domicilio para hacer el trabajo obligado y vencer en casa, donde ya cosechan seis victorias en lo que va de curso. Esos números le permiten dormir esta semana en Europa, con el permiso de la Real Sociedad.
Apenas transcurrieron nueve minutos de encuentro cuando Gerard Moreno se puso entre ceja y ceja abrir la lata. El Levante comenzó mejor, pero no pudo frenar el poderío del 'submarino amarillo' en una jugada directa: pase largo de Cazorla, dejada de Alcácer y disparo al palo largo del máximo goleador nacional de Primera División, junto a Roger, que era su rival este sábado.
El partido del Levante en tierras castellonenses no fue nada malo. Tras vencer al Leganés, los pupilos de Paco López parece que han encontrado de nuevo el carril por el que sellar la permanencia por la vía rápida, aunque deberán esperar por la falta de acierto en ambas áreas que mostraron en La Cerámica.
Un ritmo ramplón de juego marcó el devenir del resto del primer tiempo. El dominio fue para el Levante, pero muy estéril y sin incomodar en absoluto a un buen Villarreal en defensa, en el día del regreso de Pau Torres, que salió sustituyendo al mágico Cazorla en el 91', después de que ambos recibieran una espectacular ovación.
Con más descaro reanudó el Levante el partido tras el paso por vestuarios. Postigo y Bardhi gozaron de las mejores ocasiones para el empate, pero Asenjo estuvo inconmensurable en ambos casos. Estuvo genial el portero palentino, aunque no pudo evitar el empate de Mayoral en el 56' tras una asistencia fenomenal de Clerc.
La respuesta del Villarreal fue inmediata y, gracias a ello, pudo encarrilar un triunfo vital. Un gran robo del recién entrado Anguissa precedió a la asistencia de Gerard Moreno para un Moi Gómez eléctrico en la frontal, donde armó un disparo potente y raso a la cepa del poste.
Apretó el Levante de forma testimonial, sin llegar a agobiar a los amarillos en defensa. Calleja metió a Chukwueze para buscar la sentencia, y Sergio León completó la delantera 'granota'. La suerte estaba echada: el Villarreal, fiel candidato a ocupar zona de Europa.