Lección de sufrimiento con billete a la final

Un encuentro a todo o nada contra el eterno rival. La gloria de la final en juego en 90 minutos y la oportunidad de revancha de la última 'Concachampions'.

Así afrontó Tigres un encuentro que, tras casi 100 minutos de agonía, acabó clasificando al conjunto universitario a la gran final del Clausura Mexicano.

El conjunto 'felino' se impuso por 1-0 a Monterrey en el 'Clásico Regio', igualando el triunfo logrado por su rival en el duelo de ida, pero su mejor temporada regular le valió para lograr el billete a la finalísima.

El choque, lleno de tensión desde el primer momento, comenzó favorable a Tigres, que intentó adueñarse del esférico desde los primeros minutos.

El equipo local pudo ponerse por delante muy pronto tras un posible penalti por manos en el área, pero el colegiado decretó que fueron involuntarias tras consultar el VAR.

Monterrey, pese a ceder la iniciativa del choque, estaba muy cómodo atrás y no dejaba casi huecos al combinado 'felino'. Y además incluso metía miedo en alguna contra, con un remate de Pabón que escupió la madera.

El duelo parecía condenado al 0-0 al descanso, pero en el último suspiro hizo acto de presencia la cabeza de Guido Pizarro para poner el 1-0. 

Un tanto que daba el pase a Tigres y obligaba a Monterrey a buscar el gol, algo que hizo con ahínco tras la reanudación.

La segunda parte fue claramente para 'Rayados', que lo intentó de todas las maneras posibles y convirtió en héroe a Nahuel Guzmán.

El guardameta de Tigres detuvo absolutamente todo en una actuación para el recuerdo y sostuvo a su equipo en pleno vendaval de Monterrey.

Al final, tras siete minutos de añadido que se hicieron eternos, el equipo universitario festejó el 1-0 que le da el pase a una nueva final.