El caos se apoderó del Oporto-Sporting. Durante todo el partido estuvieron saltando chispas entre los jugadores, habida cuenta de que este partido podía decidir la Liga, pero todo se salió de control al final. Cuatro rojas y una tangana multitudinaria emborronaron un duelo que debía haber sido vibrante.
Fue un partido bronco. Primero contra segundo en el estadio Do Dragao. Iba a haber algo más que palabras en algún momento, y así fue. Se mostraron la friolera de once amarillas, cuatro para el Oporto y siete para el Sporting, dos de ellas a Coates, que dejó con uno menos a los 'leones' al poco de comenzar el segundo tiempo.
Pero eso no fue nada en comparación con lo que se vivió en el décimo minuto del añadido. Todo comenzó con un rifirrafe entre Palhinha y Marchesín. El delantero del Sporting tocó en la cara al guardameta del Oporto, quien exageró la agresión.
Se desató el caos. El portero de los 'dragones' se levantó hecho una furia y se formó una tangana multitudinaria, en la que participaron hasta empleados del club norteño.
February 11, 2022
Cuatro jugadores acabaron expulsados: Palhinha y Marchesín, como detonadores del conflicto, y Pepe y Bruno Tabata por participar de ella con más interés que el resto. Dos de cada equipo.
En medio del caos se vivieron situaciones más que desagradables, como cuando un recogepelotas golpeó por la espalda a Matheus Reis, y este reaccionó con lo que parece ser un escupitajo hacia su agresor, lo que le valió llevarse golpes del resto de trabajadores y recogepelotas que estaban metidos en la tangana.
February 11, 2022
Una pelea salvaje que, por suerte, solo se saldó con rojas, muchas rojas, pero ningún daño personal. Está por ver si las autoridades futbolísticas lusas toman cartas en el asunto, y si la sanción que a buen seguro les caerá a los cuatro resulta ejemplarizante.