Locura china por el Mundial

La decepción de que el combinado nacional no lograra la clasificación para el Campeonato Mundial de Fútbol de Rusia no ha sido razón suficiente para quebrar la ilusión de los numerosos aficionados al fútbol que hay en el país asiático.

Han pasado ya 16 años desde la primera y única vez que China participó en una fase final de un Mundial, cuando logró su clasificación al campeonato celebrado en Corea del Sur y Japón en 2002, con un combinado dirigido por Bora Milutinovic, un héroe actualmente entre los fans de esta nación.

Aun así, más de 100.000 chinos se desplazarán a Rusia para disfrutar del ambiente y de los partidos del torneo de fútbol más prestigioso del mundo a nivel de selecciones.

Shanghái será la localidad que aporte el mayor número de aficionados, seguida de Pekín y de otras grandes ciudades como Cantón y Shenzhen.

De las 2.403.116 entradas vendidas en todo el mundo, 40.251 han sido para aficionados chinos, informó China Daily, lo que da buena muestra de las ganas de fútbol que se tienen en el país.

Las ventas de vuelos entre China y Rusia se han incrementado un 400 %, anunció Ctrip, el mayor servicio de venta de billetes online del país asiático.

Tal es la euforia por el torneo que las autoridades locales chinas van a llevar a cabo una campaña en el país contra el alcohol en la conducción durante todo el campeonato para evitar accidentes de tráfico, pues en el pasado Mundial de Brasil 2014 se registraron 459, dejando 191 muertos, informó Xinhua.

En Mundiales pasados, la diferencia horaria hacía que casi todos los partidos fueran en la madrugada china, por lo que su visionado a veces se mezclaba con ingesta de alcohol y fue a veces factor causante de muchos de esos accidentes. El trasnoche llegó incluso a causar fallecimientos por fatiga de espectadores que pasaron muchas noches sin dormir.

Pese a la ausencia de su selección, China dejará su huella en este campeonato en el sector comercial y financiero.

Las compañías chinas invertirán aproximadamente más de 700 millones de euros en publicidad para el Mundial, gastando más del doble de lo que hará Estados Unidos y mucho más que los 54 millones de la anfitriona, Rusia, según China Daily.

Siete compañías chinas, siendo Dalian Wanda Group la más destacada, son patrocinadoras del Mundial de Rusia, cuando hace ocho años, en Sudáfrica, sólo hubo una firma de este país, y ninguna en los torneos anteriores a 2010.

La Televisión Central China (CCTV), con unos 900 millones de espectadores, ha pagado entre 250 y 350 millones de euros por los derechos televisivos de los mundiales de 2018 y 2022, en los que se cree que obtendrá más de 600 millones en publicidad, enviando unos 70 profesionales a cubrir el torneo.

Además, Tencent, la empresa china que posee WeChat (servicio de mensajería chino), enviará más de cien empleados a Rusia para preparar un estudio en las afueras de la capital rusa donde crear y organizar el contenido a través de sus plataformas, contando con la colaboración de la ESPN, anunció South China Morning Post.

De una u otra manera el Mundial estará presente para China, donde queda patente el creciente interés por el mundo del fútbol.