El partido iba 3-1 a favor del equipo local. Entonces, el árbitro entró en acción... Se adentró en el área para ver bien de cerca una acción.
El balón fue a caerle al árbitro y el colegiado, de forma involuntaria, mandó el balón al fondo de la red del Harkemase Boys. Un gol totalmente legal.
Porque la norma dice que si el árbitro en algún momento toca el balón, debe considerarse como poste. Y si el poste manda el balón detrás de la línea, como en este caso, el tanto es completamente válido...
Una acción que no ha tardado en hacerse viral. El partido, finalmente, terminó con un 4-2 para el Harkemase Boys. La 'ayuda' involuntaria del árbitro no fue suficiente para el Hoek.
25 de mayo de 2019